Cruceros reconsideran escalas en Quintana Roo por nuevo impuesto: alerta la industria.

Ciudad de México, 29 de abril de 2025.-  La industria de cruceros enfrenta incertidumbre ante la implementación del nuevo impuesto de 42 dólares por pasajero, conocido como Derecho de No Residente (DNR), que entrará en vigor el 1 de julio de 2025. La Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe (FCCA), que representa a empresas como Carnival, Royal Caribbean y Norwegian Cruise Line, ha expresado su preocupación por el impacto económico que esta medida podría tener en destinos mexicanos, especialmente en Quintana Roo.

Las navieras ya tienen vendidos los itinerarios de este año y parte del próximo y, si se implementa el cobro del impuesto a partir del 1 de julio, tendrán que asumir este impuesto con 5 dólares por crucerista, pero irá subiendo a 10 dólares, luego a 15 dólares hasta llegar a los 21 dólares en 2027, lo que va dejándolas cada vez más con menos margen.

Según la FCCA, el nuevo impuesto podría hacer que México sea hasta un 213% más caro en comparación con otros destinos del Caribe, lo que podría llevar a las navieras a reconsiderar sus itinerarios y evitar puertos mexicanos como Cozumel y Mahahual, que dependen en gran medida del turismo de cruceros.

Aunque el gobierno mexicano ha pospuesto la implementación del impuesto hasta julio de 2025, la FCCA advierte que esta medida podría tener efectos devastadores en las comunidades costeras que dependen del turismo de cruceros,

Un impuesto que podría costar caro

La implementación del nuevo impuesto a cruceristas plantea un dilema entre la necesidad de aumentar la recaudación fiscal y el riesgo de afectar negativamente a una industria clave para el turismo en México. Si bien es comprensible que el gobierno busque nuevas fuentes de ingresos, es crucial considerar las posibles repercusiones económicas en destinos que dependen en gran medida del turismo de cruceros. ​

La falta de diálogo previo con la industria y la rapidez en la implementación del impuesto han generado incertidumbre y podrían llevar a las navieras a buscar destinos alternativos más competitivos. Es fundamental que las autoridades trabajen en conjunto con los actores del sector para encontrar soluciones que equilibren la necesidad de ingresos fiscales con la sostenibilidad del turismo en las comunidades costeras.